Monday, January 14, 2008

Piedras

Sé que puede sonar absurdo, pero es una afición mía. No digo que nadie tenga que estar de acuerdo ni compartirla. Tampoco lo recomiendo como terapia para equilibrar el chi o redondear los chacras. Tan solo es algo que comencé a hacer. Creo que la primera vez tenía seis años. Me maravilló aquella playa hecha de piedras y guijarros. Todas las playas que había visto en mi vida, ya sabéis, en fotos, videos y películas, en calendarios o dibujos, eran de arena fina. Amarilla o marrón o blanca. Pero aquella estaba sembrada de millones de guijarros y piedras de todos los tamaños. Cogí una de ellas, busque la superficie plana y estampé una palabra con un rotulador. No me acuerdo de cuál era. Tan solo me fijé en el conjunto de letras que flotaban en mi cabeza y lo escribí en la superficie de la piedra. He pasado muchos años tratando de recordar esa primera palabra que lo cambió todo. Al menos para mí y mi forma de ver el mundo.