Saturday, December 29, 2012

"Échale huevos, enano"


- ¡Échale huevos, enano!
Y me empuja. Yo trato de mantener mis pies aferrados al suelo, pero él es mucho más grande. No sólo él, todos son más grandes.
Una línea de tierra marca el límite de a donde puede llegar el perro del bedel atado a su cadena. Una línea arrancada al césped por docenas de alumnos que se apostan allí y esperan a que el perro furioso se lance contra ellos para quedar detenido a escasos centímetros, ladrando y masticando el aire cercano a sus genitales con sus mandíbulas.